El tratamiento a base de ácido hialurónico invierte la polaridad de los iones del cabello y, de esta forma, logra una estructura lisa cuando se aplica la plancha para el pelo. Además, lo desencrespa y le da un brillo natural que no se consigue con otros tratamientos.
La principal ventaja de este tratamiento es el elevado nivel de hidratación que se logra una vez aplicado el tratamiento. Asimismo, compensa los efectos negativos producidos por el sol, los tratamientos agresivos previos y cualquier otra circunstancias que produzca la pérdida de hidratación en el pelo.
Por tanto, al aplicar este tipo de tratamiento se evitará la rotura, sequedad y périda de color del cabello. Este tratamiento consigue una duración mayor cada vez que se aplica y, como con otros tratamientos, es muy recomendable el uso de champús sin sulfatos.